Tabla de Contenidos Cuando se trata de manejar la artritis, además de seguir los tratamientos
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Las rodillas son las articulaciones que permiten el movimiento, gracias a ellas puedes realizar prácticamente todos tus movimientos diarios. A pesar de que al caminar, correr y hacer deportes comprometes otros huesos y articulaciones las rodillas son una parte esencial para estás actividades.
Esto quiere decir que si sometes tu rodilla a un movimiento irregular y creas alguna lesión o desgaste en esta zona bajas tu calidad de vida limitando los movimientos que te permiten llevar a cabo tu rutina de vida diaria.
Para los deportistas y personas mayores es importante brindar el conocimiento amplio de como cuidar sus rodillas para evitar un problema a largo plazo. Con este propósito se ha creado este artículo para llevar conciencia a las personas y que puedan cuidar sus rodillas.
¿Cómo puedo evitar posibles lesiones en mis rodillas?
Estiramiento:
El estiramiento prepara los ligamentos de la articulación para el movimiento. Seas deportista o no es importante que protejas tus rodillas con un poco de estiramiento antes de cualquier actividad física.
Incluso si te consideras una persona sedentaria o de poco ejercicio puedes proponerte estirar las rodillas al menos una o dos veces por semana.
Para estirar esta zona solo debes hacer movimientos en las piernas que creen una leve extensión en la articulación, como, llevar el talón a la parte trasera del muslo por unos segundos.
Calentamiento:
Este punto es bastante importante para la preparación de todo el cuerpo para la actividad física, hay quienes consideran que es una pérdida de tiempo mientras que tiene un impacto significativo en la salud de las articulaciones a largo plazo.
Para calentar puedes comenzar con movimientos suaves y sostenidos que involucran las articulaciones a trabajar, por ejemplo rodilla, tobillos, codos, muñecas, dependiendo que tipo de actividad física realizarás.
¿Qué hábitos puedo incluir en tu rutina para cuidar mis rodillas?
Cuidar la salud y buen funcionamiento de las rodillas es un trabajo que requiere años, por eso confiamos que al enseñarle a los jóvenes a cuidar su cuerpo creamos adultos saludables.
Sin embargo, estos consejos de cuidados son válidos para todas las personas que deseen monitorear la salud de sus rodillas, prevenir lesiones o mejorar la condición actual de su articulación.
Mantener un peso corporal saludable:
La cadera, las rodillas y los tobillos son esas zonas flexibles que cargan el peso de nuestro cuerpo y nos ayuda a movilizarlo.
Cuando sometemos a la articulación a moverse con sobrepeso, sea corporal o de entrenamiento, nos arriesgamos a sobrecargar la zona y crear problemas a largo plazo. Lo ideal es que la articulación pueda realizar el movimiento de manera libre.
Cuidar el peso al que sometemos a nuestras articulaciones nos garantiza un funcionamiento efectivo de la misma durante años.
Ajusta tu postura:
Sí, la mayoría de los desgastes de rodilla se producen por un desajuste al caminar, la postura esta relacionada con este resultado. Cuando adoptamos una mala postura y la mantenemos durante años los huesos y articulaciones la acogen haciendo que los tratamientos sean más complicados cada año.
Utiliza un buen calzado:
Los zapatos también influyen bastante en la salud de la rodilla, sobre todo si realizamos deportes con el calzado equivocado podemos generar una lesión complicada.
Teniendo en cuenta el punto anterior, la postura inadecuada, también le podemos agregar el uso de zapatos y tenemos un resultado doloroso.
Si por el contrario aceptamos nuestra postura equivocada y buscamos los zapatos correctos que nos ayuden a disminuir o mejorar el paso estaremos contribuyendo con la salud de nuestra rodilla.
Apuesta a la actividad física:
El movimiento cardiovascular, de resistencia y hasta de fuerza pueden ser un aliado para el cuerpo, incluyendo las articulaciones, siempre y cuando lo realicemos de la forma adecuada.
Con la actividad física pueden fortalecer los músculos y tendones alrededor de tu rodilla. Para lograrlo es necesario identificar el tipo de ejercicio y movimiento que te gusta realizar, analizar los pro y contras y conocer el riesgo de la actividad.
Toda actividad deportiva tiene un riesgo de lesión, si lo conoces lo puedes evitar.
Por ejemplo, los ejercicios de fuerza y pilates para la rodilla hechos de la forma incorrecta pueden hacer daño, correr con sobrepeso también. Entonces, identifica cuál es la actividad que deseas realizar y pon en primer lugar la salud de tus articulaciones.
Escucha a tu cuerpo y a tus rodillas:
Si haces ejercicio conectado con tu cuerpo podrás determinar cuándo parar, si sientes dolor, incomodidad, debilidad o presión debes parar para no sobreexigir a tu articulación.
Cada uno de estos consejos tienen el propósito de cuidar una zona tan importante y necesaria del cuerpo como la rodilla, incorporalos a tu rutina y mantente a salvo de lesiones y complicaciones.